EL ARTE DE LAS CALLES

Por Lidia Castro

El mundo está lleno de artistas, que con su talento nos alegran el día a día y así mismo solventan su vida a través del arte, nuestra ciudad de Trujillo no es ajena a esto, pues todos los días se puede ver a artistas callejeros que tras un semáforo en rojo nos brindan un show de 60 segundos con el fin de ganar dinero a cambio de su talento. Tal es el caso de Raúl Rojas Olivera de 29 años que pasa su día a día en las calles, mostrando lo que mejor sabe hacer que son los malabares y la magia, que es el estilo de vida que el lleva para saldar sus gastos pues el proviene de la ciudad de Lima, un poco al sur de nuestra ciudad. Así nos cuenta que todo el trabajo que realiza lo lleva haciendo durante aproximadamente 8 años, pues su meta personal es viajar por toda Sudamérica y conocer muchas ciudades demostrando su talento y relacionándose con muchas más personas.

Sin embargo, este no fue siempre su sueño, pues al principio el solo se dedicaba a “Break Dance” en las calles, sin necesariamente depender de eso, pero por cosas del destino conoció a un malabarista que le brindó la oportunidad de su vida “Aprender a realizar trucos y así poder vivir de su arte para poder conocer muchos lugares”, así empezó un gran camino para el en el mundo del arte callejero pues en el semáforo que le toque Raúl debo mostrar sus mejores trucos.

Nuevas experiencias lo motivaron a continuar con este camino, y aunque al principio le fue difícil adaptarse, hoy por hoy se ha acostumbrado a ese tipo de vida, pasando las 24 horas en las calles y teniendo desafortunadamente que dormir muchas veces en la calle, algo que toma con mucho optimismo pues para el cumplir sus sueños no son imposibles, pero tampoco fáciles. Una de sus principales anécdotas es que no siempre su trabajo fue bien recibido por todos pues en países como Argentina y Bolivia, está prohibido que los artistas trabajen en los semáforos, y eso es lo que le dificulto bastante la estadía en esos países vecinos. Así como también le permitió poder aprender de los errores y le dio la fuerza necesaria para continuar con sus sueños, conociendo aproximadamente 6 países de Sudamérica, entre ellos: Colombia, Argentina, Bolivia, Ecuador, Venezuela y Perú (Otras ciudades diferentes a su lugar de procedencia).

Siendo así un sueño que aún no termina, pues Raúl tiene muchas metas a futuro entre las más cercanas su deseo es poder ir a Brasil, y perfeccionar su arte con la ayuda de los artistas que conozca allá, además también poder expandirse y conocer otros lugares, sus culturas y relacionarse con su gente que es lo que a él le apasiona más, pues sus ansias de conocer son muchas y eso es lo que le abrió el camino hacia otros lugares.

Raúl nos invita a perseguir nuestros sueños, motivándonos a luchar por lo que más nos gusta pues los único que nos ponemos limites somos nosotros mismos, y siempre debemos hacer las cosas con el corazón y triunfar haciendo lo más nos gusta es lo más gratificante que puede existir.